Sigmund Freud, el padre del psicoanálisis, sostenía que los sueños existen para satisfacer los deseos ocultos que cada persona tiene o que son un reflejo simbólico de los anhelos reprimidos del ser humano.

La ciencia demuestra que los sueños se forjan a través de las emociones, las aspiraciones personales, las frustraciones, entre otros componentes que podrán llevarte a situaciones o lugares inimaginables, agradables o no, y hasta pueden llegarte a parecer totalmente reales.

¿Cuánto tiempo soñamos?

Según analistas, nos pasamos la tercera parte de nuestras vidas durmiendo, y no es reprochable, ya que el descanso es esencial para nuestro funcionamiento y vitalidad.

Sin embargo, no todo el tiempo que dormimos, soñamos. Se estima que soñamos un promedio de 5 a 20 minutos cada noche, que puede llegar incluso hasta una hora en casos aislados, por lo que si sumamos estas cifras acumulamos unos 6 años de sueño en una sola vida.

Como datos interesantes, podemos añadir que la ciencia ha calculado que un ser humano en el transcurso de una vida promedio pasa 30 años de pie, 16 años sentado, 8 años alimentándose y año y medio haciendo ejercicios. Otro de los datos curiosos es que se invierten ocho días de vida en saludar.

¿Por qué a veces no recordamos lo que pasa en los sueños?

En el momento de más profundo descanso (la fase REM, caracterizada por movimientos oculares rápidos) es cuando acontecen esos sueños vívidos que después podemos recordar o no.

Para describirlo ligeramente, cuando soñamos parte del cerebro se paraliza y detiene su funcionamiento.  

Los escáneres cerebrales han demostrado que cuando soñamos los lóbulos frontales, que juegan un papel fundamental en la estructuración de la memoria y los recuerdos, permanecen inactivos.

Sin embargo, hay otra zona del cerebro que se mantiene activa: el hipocampo, quien durante la etapa del sueño se desconecta para procesar la información que recibimos durante el día borrando datos, imágenes e informaciones con el objetivo de que solo se almacene en la memoria a largo plazo (en el recuerdo) lo que se considere importante.

Cuando despertamos, usualmente el hipocampo se conecta o pasa a modo consciente, siendo culpable de no permitirnos conservar en el 95% de los casos, muchos de esos sueños que vivimos cada noche.

Solamente las personas que, por las razones que sean, al despertar logran la desconexión del hipocampo un poco más tarde que el resto, son las que pueden conservar por breves segundos o permanentemente muchos de esos pedazos de vivencias oníricas a su memoria.

Los sueños según el sexo

Varios estudios han hallado ciertas diferencias entre los sueños de mujeres y hombres. Y las diferencias radican en el contenido de los sueños.

Los hombres suelen tener sueños con escenas agresivas. En cambio, las mujeres tienden a tener sueños algo más prolongados y de una mayor complejidad en detalles, personajes y situaciones.

Además, los hombres sueñan más con otros hombres, en cambio las mujeres suelen soñar con personajes de ambos sexos por igual.

Tiempos de sueño y la edad

Recién nacidos (0-3 meses): el rango de sueño es 14-17 horas.

Bebés (4-11 meses): el rango de sueño es 12-15 horas.

Niños pequeños (1-2 años): el rango de sueño es 11-14 horas.

Niños en edad preescolar (3-5): el rango de sueño es 10-13 horas.

Niños en edad escolar (6-13): el rango de sueño es 9-11 horas.

Adolescentes (14-17): el rango de sueño es 8-10 horas.

Adultos más jóvenes (18-25): el rango de sueño es 7-9 horas.

Adultos (26-64): el rango de sueño es 7-9 horas.

Adultos mayores (65+): el rango de sueño es 7-8 horas.